La tasa de homicidios o muertes violentas subió este año de 86,5 a 91,6 por cada 100.000 habitantes, lo que lo consolida a Honduras como el país más violento en América Latina, según un informe de la Organización de los Estados Americanos (OEA).
El estudio difundido el 16 de septiembre, indicó que en el 2011 se reportó la cifra récord de 7.104 asesinatos en el país.
Para la OEA, Honduras mostró un marcado incremento de la violencia durante el último lustro, que incluyó la crisis política del derrocamiento del presidente Manuel Zelaya en junio de 2009 y la posterior violencia generada por los carteles del crimen organizado desplazados ante el acoso de los esfuerzos antinarcóticos en México, para los que Estados Unidos ha comprometido 1.400 millones de dólares a través de la Iniciativa Mérida.
«Las cifras del 2011 representan el nivel más alto desde que la tendencia ascendiente comenzara en 2004, cuando la tasa de víctimas de homicidio intencional fue de apenas 31,9 por cada 100.000 habitantes», afirmó el informe.
En el orden siguen El Salvador con 69,2 y Jamaica con 41,2.
El documento señaló que esta es una síntesis de la situación de las Américas en materia de seguridad ciudadana, agrupada en 82 tablas estadísticas.
Venezuela ocupó el cuarto lugar con una tasa de 49,3 en el 2009, la más reciente, mientras que Colombia registró una tasa de 37,7 homicidios por 100.000 habitantes en 2010 y México 18,6.
Los números más bajos corresponden a Canadá con 1,5, Chile con 3,7 y Estados Unidos con 4,6.
Las estadísticas mostraron que los siete países centroamericanos duplicaron su tasa de homicidios en la última década de 26,6 en el 2000 y 43,3 en 2010, y que los 12 países caribeños experimentaron un incremento menor, pero también importante del 16,4 en el 2000 al 21,9 en el 2010.
Sin embargo, la tasa promedio de los 34 países del hemisferio se mantuvo prácticamente igual, de 15,6 en 2010, por la estabilidad relativa en América del Norte (7,3 en el 2000 y 7,8 en 2010) y la mejora experimentada por los 12 países sudamericanos, que lograron descender la tasa en 2010 al 21,1 respecto al 26,1 registrado en el 2000.
En Honduras ocurre una muerte violenta cada 74 minutos y sin existir una guerra o conflicto bélico. Por eso, se le considera la nación más violenta del mundo.
Carlos Rubio |
Al respecto, el cura párroco de la iglesia Catedral de Tegucigalpa, Carlos Rubio, dijo el 16 de septiembre en su homilía dominical que Honduras enfrenta “un panorama gris” porque la violencia gana cada día la batalla a los cuerpos de seguridad.
“Es por eso que el país necesita un cambio de actitud de todos los sectores para que el panorama cambie”, añadió. “Y en bien del pueblo les digo que no podemos llamarnos hijos de Honduras si actuamos en contra de nuestra familia como malos hijos, y en vez de construir una mejor patria la estamos destruyendo con tanta violencia”.