Dos hombres armados que viajaban en una motocicleta mataron a tiros al locutor y estudiante de periodismo de la Universidad Nacional Autónoma, Angel Edgardo López Fiallos, cuando caminaba por un lugar céntrico de Tegucigalpa.
López, de 35 años, recibió cuatro disparos en su cabeza y cayó en las gradas del barrio La Hoya de la capital.
El locutor salió de su casa en la Colonia San Miguel, al este de Tegucigalpa, e iba a su trabajo en el Grupo Sociedades Bíblicas de Honduras, donde era promotor de desarrollo de proyectos comunitarios evangélicos.
Según la policía, los individuos intentaron asaltar a López, pero él se resistió y quiso huir corriendo del lugar. Sus agresores le dispararon en repetidas ocasiones y una bala hirió a un joven transeúnte identificado por las autoridades como Gerardo Enrique Mejía, quien fue trasladao a un hospital público.
El cuerpo del universitario quedó tirado en las gradas de La Hoya con su mochila a la espalda, donde llevaba una computadora portátil y artículos personales que sus asesinos no pudieron robarle.
López ingresó hace ocho años como locutor y operador de la radioemisora evangélica Stereo Luz 103.7 FM, pero desde este año se desempeñaba como periodista en La Voz Evangélica.
Su caso se suma a más de 33 asesinato de periodistas y trabajadores de los medios de comunicación registrados en los últimos tres años por la violencia generalizada desatada en Honduras por los pandilleros aliados al crimen organizado y al narcotráfico ante la incapacidad del gobierno.
El Comité por la Libre Expresión (C-Libre) documentó el caso.
C-Libre es una coalición de periodistas y miembros de la sociedad civil constituida para promover y defender la libertad de expresión y el derecho a la información en Honduras.