Puesto actual: Fiscal Especial de la Niñez, tiene 19 años de laborar en el Ministerio Público y 9 de trabajar en la Fiscalía de la Niñez.
En el periodo anterior, Casa Alianza la propuso para el cargo de Fiscal Adjunto.
¿Cuáles son los delitos contra menores que ocurren con mayor frecuencia en Honduras?
R.
Uno de los principales delitos en perjuicio de los niños y las niñas es el abuso sexual, para el cual tenemos una unidad especial trabajando y donde también se trabaja con una fiscalía de turno, otro delito muy recurrente es la muerte violenta de menores, donde desde finales del año pasado las autoridades superiores vienen trabajando en un nuevo esquema de atención a través de un proyecto que contará con unidades de respuesta inmediata de todo lo que tenga que ver con muertes violentas.
También podría mencionarse la negación de asistencia familiar, donde quienes deben darle lo necesario al niño no lo están haciendo, sobre todo los padres irresponsables, porque las estadísticas demuestran que quien al final queda con la responsabilidad es la madre. Además está la trata laboral, la explotación sexual y del involucramiento de niños en la criminalidad organizada.
¿Muchos menores mueren violentamente y sus cuerpos presentan características similares de ejecución, existen en Honduras escuadrones de la muerte?
R.
No está confirmado, pero sí se ha mencionado. Lo que sí le puedo confirmar es la muerte de menores provocada por riñas entre grupos, por ejemplo: conductores del transporte urbano que han asesinado jóvenes que cobraban impuesto de guerra, hay condenas que dan cuenta de ese tipo de problemática. Otro es el conflicto que han generado las barras deportivas. Yo creo que lo más importante es hacer investigaciones que nos llevan a los principales actores para descartar que haya escuadrones dedicados a la eliminación de jóvenes. Aproximadamente un 20% del total de muertes violentas que se producen en Honduras son contra menores de 18 años y son cifras que debemos reducir en el más corto plazo.
¿Qué hace la Fiscalía para combatir la trata de personas, delito que afecta considerablemente a la niñez?
R.
Es un delito de lesa humanidad y que constituye una afrenta para todos los países del mundo que la padecen, en Honduras ha habido avances significativos y así lo establece el informe que recientemente publicó el Departamento de Estado. Este documento ubica a los países en una escala y señala que Honduras ha bajado y lo coloca en la lista de vigilancia, eso significa que alguna cooperación puede ser suspendida para el país, sobre todo aquella que no implique ayuda humanitaria.
Ese es un punto que debe hacer reflexionar a quienes nos gobiernan para que se asignen más recursos a este tema. Si bien es cierto que hemos tenido el avance de aprobar una la Ley contra la Trata, no se han hecho suficientes esfuerzos para hacer investigaciones efectivas y eso le corresponde a la Policía Nacional. Otro punto importante es que no se hacho lo suficiente para dar atención a las víctimas.
¿Cuántos casos por trata de personas maneja la Fiscalía de la Niñez?
R.
Es un delito que se da y permanece en la clandestinidad y tengo que informar que la unidad espacial que tenemos en la Fiscalía de la Niñez conoce de casos contra mujeres, hombre y niños, independientemente de la edad, pero son las niñas y niños los más vulnerables en este delito. Solo Tegucigalpa se maneja 50 denuncias que tienen que ver con explotación sexual y trata, en San Pedro Sula también maneja una cantidad similar.
También se están haciendo allanamientos y reuniendo pruebas para llevar a los tribunales los casos por pornografía infantil y otros delitos que se cometen en contra de los niños. Pienso que los casos deben ser fortalecidos con mayor investigación y ese uno de los puntos que solicitamos a la policía.
¿Se han presentado en Honduras casos relacionados al tráfico de órganos?
R.
Esa es una modalidad de la trata de personas, de este delito se habla mucho y la fiscalía manejó dos denuncias que fueron investigadas y desestimadas porque no hubo extracción de órganos, pero si es importante decirle a la población que esa situación sí se puede estar presentando en la ruta a Estados Unidos, por lo que poner niños en manos de coyotes o de otras personas, siempre es un riesgo. Los jóvenes que se van solos también se exponen porque sus órganos pueden ser extraídos en hospitales clandestinos.