| – Según informe, el Estado no cuenta con un plan integral para usar los ventiladores |
| – Tampoco cuenta con instalaciones necesarias para que funcionen |
| – No se ha explicado por qué se aumentó pedido de ventiladores a 450 |
| – Experto biomédico de Invest-H no divulgó conflicto de intereses; su hijo recientemente fue empleado de Dimex |
| – No se dio trato igual a empresas oferentes |
| – Mayoría de ventiladores serán entregados entre agosto y diciembre |
La Asociación por una Sociedad más Justa (ASJ) recientemente hizo público su primer informe de auditoría social a los fondos de emergencia ejecutados por Inversión Estratégica de Honduras, más conocida como, INVEST-H.
Dentro del informe figura la compra millonaria de 450 ventiladores pulmonares mecánicos para asistir a pacientes en estado crítico producto del Coronavirus. Los ventiladores modelo VS 600, tienen un costo unitario de entre aproximadamente USD $29.5 y $31.5 mil, sumando L.342,127,825.00 (US$13,834,525.88). Este monto se pagará con fondos nacionales, es decir, nuestros impuestos.
FALTA DE UN PLAN ESTRATÉGICO DE COMPRAS
A pesar que a INVEST-H ha ejecutado más de mil millones en compras de emergencia, las autoridades gubernamentales no pudieron explicar con claridad quién dio las instrucciones de comprar los ventiladores con las especificaciones requeridas y en las cantidades adquiridas.
Las autoridades gubernamentales en muchas ocasiones han alegado que la pandemia del COVID-19, ha tomado a todos los países por sorpresa. Esto puede ser en parte cierto debido a la velocidad de contagio que tiene el virus.
No obstante, los países que están teniendo buenos resultados se debe fundamentalmente a la certeza y claridad con que han reaccionado. En el caso de Honduras, ni INVEST-H, la Secretaría de Salud (SESAL) o la misma Casa Presidencial han mostrado tener una estrategia de contratación que les permita responder en tiempo.
Un ejemplo de esta falta de planificación es que el Estado tardó cuarenta y dos días después del primer decreto de emergencia para iniciar una compra de ventiladores. Desde el 10 de febrero de 2020, INVEST-H fue asignado como el comprador centralizado para la emergencia sanitaria, mediante el decreto de emergencia PCM-005-2020 de 10 de febrero de 2020. Sin embargo, es hasta el 23 de marzo que el Gobierno toma la decisión de comprar ventiladores.
NO SÉ TOMÓ EN CUENTA LA CAPACITACIÓN Y MANTENIMIENTO REQUERIDO
La opinión técnica brindada por doctores hondureños y estadounidenses, detalla que los ventiladores adquiridos son de marcas reconocidas de buena calidad.
Sin embargo, no se tomó en cuenta la capacitación de los médicos y enfermeras para su manejo, así como, la necesidad de contar con operadores encargados de su mantenimiento cotidiano. Tampoco el Gobierno se percató que el funcionamiento de los ventiladores implica una inversión en infraestructura en los hospitales que permita tener un sistema de oxígeno para alimentar los ventiladores y plantas eléctricas para los recurrentes cortes de energía.
Debido a estas complicaciones, la ASJ advierte que existe un grave riesgo que los equipos no lleguen a beneficiar a los pacientes que de urgencia los necesitan y que podrían “quedar en sus cajas o dejar de funcionar a las pocas semanas por mal manejo o mantenimiento.”
Según expertos consultados por Revistazo, otro riesgo podría ser que los ventiladores que no podrán ser utilizados terminen en clínicas privadas.
CONFLICTOS DE INTERES EN LA EVALUACIÓN DE EMPRESAS
Por ser una contratación directa, no significó que solamente sería una sola cotización o empresa adjudicada. En total, INVEST-H recibió cotizaciones de cinco empresas proveedoras de ventiladoras; entre las hondureñas está: SIMEDIC, DIMEX MÉDICA, IHFSA MÉDICA y TEKNI S. de R. L., como única empresa extranjera, fue GETINGE –de origen mexicano.
Para realizar las cotizaciones se priorizó a empresas hondureñas, y como aspecto positivo de dicho punto del proceso, se certificó el estatus legal de los futuros proveedores en esta emergencia.
Sin embargo, según el informe la selección de empresas proveedores queda salpicada por un aparente conflicto de intereses. El consultor Experto Biomédico de Invest-H, Ingeniero Oscar Sady Orellana, tiene un hijo que hasta el 30 de noviembre de 2019 se desempeñó como empleado de DIMEX MÉDICA.
Orellana no notificó al director de INVEST-H, Abog. Marco Bográn sobre esta particularidad. Tampoco se abstuvo de conocer y, sobre todo, evaluar a la empresa que en solo seis meses atrás era el empleador de su hijo.
El Ing. Orellana fue el encargado de descartar ciertas empresas, entre ellas, un proveedor de Alemania que había sido recomendada por la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS). Según lo expresado por la agencia especializada de compras de la ONU, tenía “amplia disponibilidad” para la fabricación y envío de ventiladores.
TOMA DE DECISIÓN SIN RASTRO
Un hallazgo que no pasa desapercibido es la falta de documentación de soporte que explique y justifiquen las decisiones tomadas.
En contextos de emergencia las decisiones deben ser tomadas con urgencia, sin embargo, eso no exime a las autoridades de documentar sus decisiones, más cuando se trata de algo tan sensible como una inversión de más de 300 millones de lempiras destinada a salvar vidas.
Las entrevistas hechas a la representación de INVEST-H, arrojan mucha incertidumbre en torno a quiénes fueron altos funcionarios que se encargaron de decidir las cantidades requeridas.
Según lo manifestado por la representación de INVEST-H, el subsecretario de Salud, Roberto Cosenza, determinó incrementar la cantidad de ventiladores que debían ser adquiridos de 100 a 450. Sin embargo, no hay documentación que certifique tal actuación, ni algún estudio de fuente experta.
Otro de los aspectos relevantes del informe es que se asegura que se nombró una comisión de evaluación, pero tampoco se brindaron documentos o una explicación de la selección o conformación de la comisión de evaluación y sus facultades.
CONTRATOS MILLONARIOS REPRESENTAN SALTO EXPONENCIAL PARA EMPRESAS
A SIMEDIC le fueron adjudicadas dos compras de 150 ventiladores cada uno, para entregar un total de 300 ventiladores. El valor total de ambos órdenes de compra es de L 225,222,169 (USD 9,101,988.38). Esta cifra es once (11) veces más alta que la suma de todos los contratos anteriores que SIMEDIC ha suscrito con el Estado de Honduras–en los últimos ocho años (L 19,781,309).
Para el caso de DIMEX MÉDICA que se le adjudica una orden por 150 ventiladores, el monto asciende a L 101,791,120 (aproximadamente USD 4, 732,537.20). Este monto, equivale al valor conjunto de los 171 contratos anteriores que DIMEX ha firmado con instituciones públicas a lo largo de los últimos ocho años (L 104,425,791).
Cabe mencionar que ninguna de las dos empresas había vendido ventiladores mecánicos anteriormente, ni tampoco actualmente los ofrece como productos en sus páginas de Internet.
HASTA DICIEMBRE TERMINARAN DE LLEGAR LOS 450 VENTILADORES
A pesar de que hay vidas humanas en juego con cada día que se demora la entrega de estos equipos, en ninguna de las tres órdenes de compra de este proceso INVEST-H pactó como condición la aplicación de sanciones o penalidades por incumplimientos de las fechas de entrega ofrecidas por parte de los proveedores.
Como se puede observar en el cronograma de entrega de los ventiladores, el suministro vendrá de manera parcial a lo largo de los próximos seis meses. Es de tomar en cuenta que las empresas pidieron un 80% de anticipo, es decir, el Estado de Honduras le financió la compra a las dos empresas.
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Proveedor |
Fecha de entrega estimada/cantidad |
||||||||
|
Junio |
Julio |
Agosto |
Sept. |
Oct. |
Nov. |
Dic. |
Total |
||
|
DIMEX MÉDICA |
10 |
10 |
20 |
30 |
30 |
30 |
20 |
150 |
|
|
SIMEDIC |
130 |
110 |
60 |
300 |
|||||
|
Total/mes |
10 |
140 |
130 |
90 |
30 |
30 |
20 |
450 |
|
En este primer informe también contempla los hallazgos y resultados de la auditoría social a la compra directa de 250 kits de prueba PCR para el COVID-19. En la siguiente nota profundizaremos más sobre esta contratación y el efecto que pueda tener en incrementar las pruebas diarias, uno de los aspectos más reclamados por la opinión pública.
