Tras denunciar irregularidades en seis fincas camaroneras valoradas en 1.300 millones de lempiras que administra el gobierno en el sur de Honduras, el periodista hondureño Ariel D´ Vicente teme por su vida.
“Me han amenazado de muerte por mi actitud de patriota y sólo por exigir que el gobierno rinda cuentas con transparencia”, dijo el comunicador a Revistazo.
LOS ZETAS
El veterano periodista y propietario del canal 21 de Choluteca destapó un sonado caso de corrupción en el que involucró a funcionarios públicos y al narcotraficante José Luna Pereira, de quien aseguró posee tres nacionalidades: guatemalteca, salvadoreña y hondureña.
“El narcotráfico en el sur de Honduras lo controla José `Chepe` Luna Pereira, proveedor de Los Zetas de México”, afirmó. “Y en esa actividad ilícita están untados (vinculados) la policía, el ejército y algunos políticos”.
Sostuvo que “las amenazas para matarme son fuertes y se han dado por teléfono y de manera personal. Incluso, me han visitado algunos personajes para decirme: ten mucho cuidado porque te quieren matar”.
D` Vicente, de 44 años, informó que en su programa televisivo de noticias denunció en el 2010 las actividades ilegales de Luna Pereira, quien habló por teléfono al canal para decirle que lo mataría.
La Policía Internacional busca a Luna Pereira desde marzo de 2004, cuando un tribunal de Nueva York lo acusó de dirigir una organización dedicada al tráfico de personas y de cocaína que opera en Centroamérica. El hombre, conocido por una cicatriz en el lado izquierdo de su rostro, es considerado “armado y peligroso”.
“Chepe Luna es dueño de 400 cabezales o furgones que operan de Panamá a México y es proveedor de Los Zetas”, señaló.
Integrado por desertores del ejército mexicano, Los Zetas son una organización criminal de narcotraficantes. Sus miembros los entrenaron agentes de Estados Unidos, Israel y Francia en tareas de contrainsurgencia.
“Luna también es socio aquí de René Maradiaga Panchamé (ex director nacional de Tránsito y ex jefe de la policía) y alero del presidente (de facto Roberto) Micheletti y de gente grande de este país. Es dueño también de la empresa Transporte Ulúa (que opera sus autobuses entre Choluteca y la costa atlántica hondureña)», declaró el comunicador.
Para D´ Vicente “a ese hombre (Luna) no lo toca nadie en Honduras”.
POLITICOS
Entre las figuras políticas mencionadas por D` Vicente están el presidente del Congreso y aspirante presidencial del oficialista Partido Nacional, Juan Orlando Hernández; el destituido ministro de Hacienda y ex alcalde de San Pedro Sula, Héctor “Tito” Guillén, y el diputado por Choluteca, Mauricio Oliva.
“Juan Orlando y Oliva pretenden minimizar el espíritu combativo del pueblo de Choluteca, pero ambos cometen un error porque aquí nos conocemos todos”, subrayó.
“Mis denuncias son por hidalguía y sé que el gobierno no las atenderá debido a que atrás de la trama está un actor político del partido de gobierno”, declaró D´ Vicente, sin mencionar nombres.
CHOLUTECA SUMIDA EN LA CORRUPCION
Advirtió que “siempre Choluteca ha estado arrodillada por la corrupción”.
Entre esos numerosos casos irregulares citó como los más importantes el tráfico de plazas de maestros y la compra amañada de medicinas para el Hospital del Sur.
Acusó al fallecido diputado Gustavo Simón de contribuir a la corrupción en Choluteca durante los gobiernos de los presidentes liberales Carlos Roberto Reina (1994-1998) y Carlos Flores Facussé (1998-2002), y al congresista Carlos Lara en las gestiones de Ricardo Maduro (2002-2006) y del derrocado Manuel Zelaya (2006-2009).
Para el periodista, Oliva ha reemplazado ahora a Simón y a Lara porque “todo lo que se hace en Choluteca es por órdenes de ese señor”.
ACTOR DEL GOBIERNO NACIONALISTA
“Las denuncias las hago por hidalguía, aunque sé que el gobierno de Porfirio Lobo no las atenderá porque atrás de la trama hay un actor político del partido de gobierno (que no identificó)”, declaró.
Dijo no disponer de pruebas fehacientes en que fundamentar sus acusaciones, las cuales ha publica desde hace algún tiempo en su programa televisivo Prensa Libre, que dirige bajo el lema de «el micrófono del pueblo».
El Comisionado Nacional de Derechos Humanos, Ramón Custodio, protegió inicialmente a D’Vicente tras presentarlo al Ministerio Público por exponer su vida y la de su familia que reside en Choluteca.
Pero D´ Vicente rechazó la calidad de testigo protegido que le otorgó la fiscalía.
PROTEGIDO POR SU PUEBLO
“Es difícil creer en la protección de la fiscalía porque es un imperio de los delincuentes con corbata”, advirtió. Sin embargo, un policía lo cuida en su pueblo natal.
El reaccionó molesto por esa decisión de las autoridades debido a que “tener un policía al lado entorpece mi trabajo de periodista porque la gente no se me acerca como antes lo hacía para saludarme”.
D´ Vicente dijo que “estoy protegido por mi gente de Choluteca y por Dios porque doy la cara y me voy de frente, aunque he adoptado mis precauciones (para cuidar su vida) y no sé qué pasará… sólo quiero que dejen prosperar la verdad”. Expresó que no aspira a ninguna posición política.
El periodista denunció a principios de agosto que cinco comerciantes de Choluteca aportaron 3,2 millones de lempiras para sobornar a “un alto funcionario” ante el temor de que el gobierno adoptara decisiones erradas sobre la administración de las fincas de camarón que operan en las comunidades sureñas de Marcovia, Namasigûe y Choluteca.
Las empresas, de 644,8 hectáreas, produjeron en el 2010 más de 4 millones de libras de camarón valoradas en 41 millones de lempiras y pertenecieron al extinto millonario Calvin Wedler, quien aspiró a la presidente de Honduras por el Partido Liberal. Los negocios de Wedler fracasaron y el Estado se apoderó de las camaroneras porque él no pudo pagar sus deudas.
D` Vicente está seguro que más de un millón de lempiras en efectivo que la policía descubrió en un maletín en el carro de la esposa de Guillén es parte del soborno.
Preguntado por Revistazo en torno a su actitud valiente y aparentemente sin importarle su vida y la de su gente contestó: “estoy preparado para lo que viene y espero que mi denuncia siente un precedente para sanear la política”.