Ante una oposición generalizada, el Congreso suspendió el debate de la Ley Marco de la Vivienda y Urbanización con la que pretende utilizar unos 5.000 millones de lempiras aportados por los trabajadores hondureños a un fondo de aportaciones privadas.
La decisión la dio a conocer Ricardo Cardona, asesor del presidente de la cámara legislativa, Juan Orlando Hernández.
“Seguimos reuniéndonos con distintos sectores sociales para consensuar el tema”, dijo el funcionario.
El Congreso habría suspendido el análisis de la iniciativa luego de conocer la posición conjunta de las centrales obreras y empresarios que no están de acuerdo en que el gobierno use los fondos del Régimen de Aportaciones Privadas (RAP).
Más de 200.000 trabajadores de la empresa privada mantienen en el RAP alrededor de 5.000 millones de lempiras por las aportaciones obrero-patronales mensuales a la entidad.
Tanto el trabajador como su patrón cotizan al RAP el 1,5% de los salario de los empleados.
El secretario general de la Confederación Unitaria de Trabajadores, José Luis Baquedano, afirmó que entre depósitos y bienes el RAP suma unos 11.200 millones de lempiras que podrían estar en riesgo si el Congreso aprueba la ley.
La opinión de Baquedano la comparte el director ejecutivo del Consejo de la Empresa Privada, Armando Urtecho, quien aseguró que los recursos no pertenecen al gobierno y que por esa razón no puede utilizarlos.
Asimismo, el asesor de programas sociales de la Federación Sindical de Trabajadores, Armando Galdámez, dijo que lo peor que podría pasar al RAP es que sus fondos sean administrados por el gobierno.
“Con una medida de tal naturaleza se provocará el descalabro del Banco de los Trabajadores y el cierre de los créditos en el Instituto de Previsión del Magisterio”, subrayó.
Galdaémez destacó que en el caso del Banco de los Trabajadores fue el propio Congreso el que confiscó los bienes de la entidad a través de un decreto.