El gobierno hondureño anunció que indemnizará a los familiares de 107 presos que murieron en mayo de 2004 en un incendio desatado en la penitenciaría de San Pedro Sula, sobre el Caribe de Honduras.
La decisión la adoptó el Estado luego que la Corte Interamericana de Derechos Humanos, con sede en Costa Rica, sancionó a Honduras por ese hecho en abril de 2012.
El gobierno ha instado a los familiares de las víctimas a reclamar la indemnización en el Comisionado de Derechos Humanos.
