Las autoridades educativas separaron de sus cargos a cuatro dirigentes del Primer Colegio Profesional Hondureño de Maestros (Pricphma) por abandonar sus labores.
Ellos son Armando Gómez Torres, presidente del Colegio, y Orlando Mejía, secretario general, y César Ramos y Yuri Hernández, miembros de la junta directiva.
“Estamos en condiciones de informar que cuatro dirigentes del Pricphma fueron separados después de haber terminado el procedimiento administrativo aplicado en la primera y segunda audiencia de descargo”, dijo el 21 de marzo el ministro de Educación, Marlon Escoto.
Indicó que tras “agotar todo el procedimiento que establece la ley, se resolvió separar como empleados de la Secretaría de Educación a los mencionados… y estamos prestos a notificarles a ellos en las próximas horas para cerrar definitivamente el proceso”.
El proceso disciplinario se inició en febrero, luego de que las autoridades suspendieron las licencias con goce de sueldo a los dirigentes.
La Ley de Educación otorga ese beneficio por sólo cuatro años y, a excepción de Hernández, el resto superó ese tiempo por lo que estaban obligados a presentarse a su trabajo, y no lo hicieron.
Los cuatros dirigentes se declararon en rebeldía y adujeron hacer uso del derecho que les da el fuero sindical, pero las autoridades de Educación les levantaron actas por abandonar su puestos al constatar que ellos no asistieron a las aulas a cumplir sus jornadas diarias.
CAUSAS
Escoto dijo que citó el 13 de marzo a los docentes en audiencias de descargo y no asistieron, argumentando estar fuera del país en una jornada sindical en Managua.
“Comprobamos que sólo Yuri Hernández viajó a Nicaragua y los otros tres dirigentes del Pricphma se quedaron Honduras”, aseguró Escoto.
La Secretaría de Educación, sin embargo, programó una nueva cita para el 19 y 20 de Marzo, y los maestros tampoco acudieron.
“Por ello, han sido declarados en rebeldía y aceptado tácitamente así que abandonaron sus cargos”, subrayó.
A los destituidos queda ahora presentar una apelación y disponen de cinco días hábiles para hacerlo. Y, si no presentan argumentos sólidos del porqué no asistieron a dar sus clases, su despido quedará ratificado de manera definitiva.
PUESTOS
Los maestros separados tenían jornada plena. Es decir, contaban con dos plazas.
Gómez era director de la Escuela José Trinidad Reyes y docente de la Dionisio de Herrera, Mejía era director de la José Ramón Cálix y tenía otra plaza en la San Miguel de Heredia.
Ramos se desempeñaba como director de la Escuela Roberto Sosa y maestro en la Oscar Castro Tejada, y Hernández fungía como director de la Escuela República de Costa Rica con otra plaza de docente en la José Trinidad Reyes.
Escoto anunció que a otros 12 dirigentes magisteriales podría aplicar las mismas medidas.
REACCIÓN
El presidente del Pricphma, Armando Gómez, aseguró que Escoto “no tiene firmada una resolución en la que sustente que estoy despedido junto a mis colegas”.
Retó al ministro a “presentar la resolución donde me destituye”.
Criticó a Escoto de “lanzar cortinas de humo porque actualmente” y al gobierno de “tratar de desviar la atención” de los graves problemas que enfrenta Honduras.