El Tribunal de Sentencia de Comayagua, en la región central de Honduras ha declarado culpable del delito de violación especial a Concepción Arzú Martínez, director del Hogar de Niños Tierra Santa, ubicado en el municipio de La Villa de San Antonio, en departamento de Comayagua.
El imputado quien desde 2012 gozaba de medidas sustitutivas a la prisión preventiva por otro caso similar, fue enviado nuevamente por la justicia hondureña a la Granja Penal de Comayagua, donde espera que el Tribunal individualice la pena por violación especial, que de acuerdo al Código Procesal Penal hondureño, es de 15 a 20 años de reclusión.
La víctima presentada por el Ministerio Público en calidad de testigo protegido, dijo ante terna de jueces que en el año 2008 tenía 14 años y siendo una de las internas de Tierra Santa, fue violada en repetidas ocasiones por el director del centro de menores, Concepción Arzú Martínez, a quien también identifica como “Tío Santiago”.
“Yo no sabía nada de eso y siempre me decía que no me iba a doler, para mí, él era como mi padre”, dijo la víctima, tras asegurar que Martínez Arzú la obligaba a ver pornografía y que a la vez le exigía seguir los pasos de lo que veía.
Cuatro testigos también presentados por la Fiscalía confirmaron la declaración de la víctima. Sin embargo, Martínez Arzú, quien era acompañado por dos defensores privados, negó la veracidad de los hechos.
¿Y qué dice el acusado?
Concepción Arzú Martínez |
“Soy inocente y el único pecado que he cometido es haber criado y educado a esas niñas”, sostuvo con voz firme y de pie frente a los jueces, mostrando frialdad ante las acusaciones.
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Sostuvo que las acusaciones en su contra son infundadas y que todo obedece al interés de un norteamericano de quererse quedar con el centro de atención de menores.
Por el primer caso, un juez penal le dictó prisión preventiva en septiembre de 2012, pero la defensa de Arzú, apeló el fallo y una resolución de la Corte de Apelaciones de Comayagua lo dejó en libertad.
De los 50 casos que se le imputan al director de Tierra Santa, hasta hoy el Ministerio Público solo ha podido probar dos ante los tribunales de justicia. La mayoría de muchachas que supuestamente fueron abusadas sienten temor a declarar porque ven en Arzú Martínez, a un hombre poderoso. Muchas de ellas llegaron al centro de menores cuando todavía eran lactantes.
La Fiscalía pide la pena máxima y en caso de que el Tribunal emita sentencia condenatoria contra Arzú Martínez en otro caso que aún está pendiente, el imputado tendrá que cumplir dos penas, una seguida de la otra.
Riesgo social
A petición del Ministerio Público el 20 de mayo de 2010, el Juzgado de Letras de la sección judicial de Comayagua declaró en riesgo social a los niños y niñas del Hogar Tierra Santa. El tribunal ordenó que la institución fuera intervenida por Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (IHNFA) a fin de sustituir a Concepción Arzú Martínez, en la dirección de ese centro de menores.
En su fallo el juez determinó que la intervención era necesaria para asegurar el cuidado personal de los niños y niñas, atender las necesidades básicas y terminar con el peligro que amenaza la salud de los menores.
“Somos respetuosos y estamos obligados a acatar una resolución judicial, entendemos que esta resolución vino orientada a que el IHNFA tenía que hacer una supervisión sobre este centro, esto se hizo en su momento y se hicieron las recomendaciones que se les ha venido dando seguimiento a través de visitas periódicas”, aseguró a Revistazo el director del IHNFA, Felipe Morales.
Aclaró que el Hogar Tierra Santa es una institución privada con su personalidad jurídica y que el IHNFA no tiene potestad para cambiar al director.
Sociedad civil apoya el proceso
En las investigaciones y judicialización de los delitos la Fiscalía recibe el apoyo de abogados y de investigadores adscritos al Proyecto Rescate de la organización no gubernamental, Asociación para una Sociedad Más Justa (ASJ).
Buscando justicia para las víctimas, ellos, junto al personal de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC) y de la Fiscalía, durante cinco años han realizado tareas de recopilación de pruebas documentales y testificales.
La ASJ también ha brindado la atención Psicológica que han requerido las víctimas y los testigos, antes y después de rendir sus declaraciones ante las autoridades.
Cabe mencionar que con la aprobación del Tribunal de Sentencia, este juicio fue presenciado por la organización mundial, Transparencia Internacional, a través del personal del Centro de Asistencia Legal Anticorrupción.
Para los jueces es importante que una organización como Transparencia Internacional pueda observar el desarrollo de las acciones de los operadores de justicia.
También se habría lucrado de los donativos destinados a los niños
En una entrevista brindada a Revistazo en junio del 2012 cuando fueron formalizadas las acusaciones contra Arzu, un representante de una organización cooperante que había apoyado al Hogar Tierra Santa y quien por temor a represalias pidió no mencionar su nombre, calificó a Arzú como “un violador en serie”, porque “según mis cálculos, él violó a unas 50 niñas.”
Sostuvo que durante 23 años apoyó el hogar Tierra Santa con unos 200,000 dólares al año. “Y le retiré mi ayuda en el 2009, al darme cuenta de los abusos que él cometía”, afirmó.
Además dijo que para generar más ingresos para el hogar de niños, la organización cooperante instaló una planta procesadora de agua valorada en 90,000 dólares. Indicó que la organización compró también un terreno para construir un nuevo hogar infantil, el cual Arzú usaba sin autorización como finca y vendió una parte del mismo.
Tierra Santa no pagaba impuestos al gobierno y recibía numerosas donaciones de las autoridades municipales, empresarios y particulares del lugar para ayudar a los infantes bajo su responsabilidad, que jamás recibieron los beneficios.
En un comunicado, la junta directiva de Children’s Villages of Honduras, ONG estadounidense que durante muchos años apoyaba al Hogar Tierra Santa y que en el 2009 dio la alerta sobre los abusos que estaba cometiendo el señor Arzu, expresó su satisfacción con el fallo del juzgado.
«En varios momentos parecía que la justicia desvanecía y el victimario escaparía de su castigo. Sin embargo, gracias a los esfuerzos de los procuradores y el personal de ASJ, el señor Martinez pagará por las fechorías que cometió. Fue una lucha difícil, pero al final el sistema judicial hondureño sí funcionó, a pesar de los esfuerzos de aquellos que intentaron frustar el ejercicio de la ley.»