Durante décadas enteras se conoció como Radio X, propiedad del empresario René Zepeda. Pero hace unos meses, la emisora pasó a llamarse Radio ABC, propiedad ahora del también empresario Rodrigo Wong Arévalo. Sin embargo, en medio de esa transacción comercial, no hay quien pague las prestaciones laborales de quienes fungieron como personal de planta de la radio.
Delmer Valladares Fajardo trabajó durante casi dos décadas como operador y locutor de Radio X. Él, junto a una aseadora, el vigilante que cuidaba los transmisores y dos operadores más, laboraron de forma permanente y continua durante muchos años. Sin embargo ni el vendedor, ni el comprador de la radio responden por su antigüedad laboral.
Valladares dijo a Revistazo.com que su ex patrón, René Zepeda, de manera maliciosa, cambio la razón social a principios de este año.
“De Radio X, pasó a llamarse ABC, y nos damos cuenta porque sale publicado en el diario La Tribuna”, dijo el entrevistado quien además de operador de la X, dirigía dos programas de música ranchera.
El entrevistado dijo que están conscientes de que la radioemisora fue comprada por el empresario, Rodrigo Wong Arévalo, sin embargo afirmó que el nuevo dueño de la X, les ha pedido firmar un nuevo contrato, tras manifestar que no se hace responsable de la carga laboral.
“Tengo 17 años de trabajar allí, casi desde cuando se fundó la radio. El caso es que yo estaba trabajando bien con René, hasta el 31 de julio que él entregó las llaves y todo, pero al personal no le dijo nada”, afirmó.
Informó que el 18 enero, con el propósito de aclarar la situación, acudieron a la Secretaría del Trabajo y solicitaron se hiciese una inspección. Indicó que una inspectora levantó un acta en la cual Zepeda, antiguo propietario de Radio X, manifestó que podían hacer lo que quisieran con sus cosas.
“Desde enero hay una acta firmada en el Ministerio del Trabajo y desde esa fecha nos ha venido diciendo que no se ha vendido la radio y que no se ha vendido. Y una semana antes del 31 que fue domingo, nos damos cuenta que va a entregar la casa donde están instaladas las oficinas de radio X, por el dueño de la casa”, aseveró el locutor.
Aseguró que al darse cuenta de lo sucedido, de nuevo acudieron a la Secretaría del Trabajo para pedir una aclaración sobre su situación laboral, ya que pese a que la funcionaria de esa dependencia estatal levantó el acta, René Zepeda niega haber vendido la radio. “Dice que no ha vendido la radio, nuevamente dice que se hace cargo de nuestra antigüedad y de todos nuestros derechos; es una confusión”, dijo.
Wong Arévalo le pide firmar nuevo contrato
El locutor y comunicador social informó que ante la incertidumbre con el antiguo dueño de la radio, se entrevistó con el nuevo propietario, quién le habría manifestado que para seguir laborando debían firmar un nuevo contrato y que él, no se hacía cargo de su antigüedad.
Valladares notificó de lo acontecido con Arévalo, a Zepeda, quien le habría dicho que, “ese no era el trato con Rodrigo”.
Por otro lado, el denunciante manifestó que Wong Arévalo le dijo que Zepeda, nada tenía que ver con la nueva administración de la empresa y le recomendó dejar a un lado el reclamo de sus derechos. “El señor Rodrigo Wong Arévalo me dijo: no demandes a René Zepeda, porque no tiene nada, yo soy el socio mayoritario y aquí es otra administración.”, refirió el locutor.
Zepeda los deja «en el aire»
De acuerdo a Valladares, las violaciones laborales en el caso de él y sus compañeros son evidentes. Asegura que Leopoldo Pineda, quien fue el encargado de la vigilancia de los transmisores de la radio, ahora realiza labores de jardinero.
“Lo están bajando a la categoría doméstica, porque un jardinero no está todo el día y le pagan cuando hace su labor; automáticamente está despedido. La aseadora por otro lado, fue a las oficinas de ABC y le dijeron que ahí ya estaba una aseadora contratada”, sostuvo.
Zepeda no les pagaba ni el salario mínimo
De acuerdo con la versión de Valladares, la necesidad de contar con un empleo obligó a sus compañeros a aceptar los salarios que a Zepeda le pareciesen mejor, razón por la cual ninguno recibía el salario mínimo.
Reveló que la aseadora trabajando medio tiempo, devengaba 1,250 lempiras mensuales y que debido al atraso en su remuneración, en muchas ocasiones tuvo que realizar gestiones ante la Secretaría del Trabajo.
“Solo había un compañero que ganaba el salario mínimo, pero por la lucha que él mismo hizo; el otro compañero ganaba 3 mil lempiras y el que estaba en los transmisores 1,900 lempiras. Este señor ha pedido las vacaciones y él le ha dicho, «vos no tenés derecho a vacaciones porque vivís en la casa». Pero este don trabajaba las 24 horas porque prendía el transmisor a las 4 de la mañana, lo apagaba a las once de la noche y se iba a acostar y estaba pendiente que nadie se fuera a meter ahí”, arguyó.
Expresó que a él y los otros dos operadores, el propietario de ABC les ofrece empleo, oferta que no pueden aceptar mientras no se garantice el pago de sus derechos laborales.
“No podemos firmar un nuevo contrato, porque nosotros somos empleados de la X y tenemos que continuar. El señor René Zepeda cuando dice una cosa dice otra; el señor Rodrigo Wong Arévalo no se compromete con nosotros y me dice que don René no tiene nada, entonces a quien le vamos a pedir las prestaciones”, lamentó.
“Don Rodrigo solo conmigo ha platicado, y ha platicamos como voy a hacer los programas, porque yo tengo un programa ranchero; me ha dicho vas a trabajar de tal hora a tal hora, te voy a pagar tanto, te voy a dar opción de dos anuncios, lo cual yo lo miro bien, pero si yo llego a firmar algún documento, prácticamente estoy renunciando a mi antigüedad, porque no es la continuidad “.
La radio X operó durante muchos años subarrendando espacios a periodistas y locutores, quienes para desarrollar sus espacios informativos, cancelaban una cuota mensual al dueño.