Quince meses han pasado desde que la Secretaría de Salud Pública dejara vencer 21.5 millones de lempiras en medicamentos antirretrovirales pero inexplicablemente esa Secretaría de Estado mantiene engavetado un reclamo administrativo relacionado con una condición contractual que obligaría a la proveedora de estos medicamentos, Droguería Médica Internacional (DROMEINTER), reponer las medicinas vencidas.
DROMEINTER se ha resistido a reponer estos medicamentos, solicitando una explicación de las causas que motivaron su vencimiento. De acuerdo a la carta de compromisos estaría obligada a reponer las medicinas si el vencimiento hubiera sido dentro de los parámetros razonables. Sin embargo, del total de la compra, las autoridades dejaron vencer el 47 %, cantidad que a los ejecutivos de la compañía les parece irracional.
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El reclamo
En mayo de 2012, la Secretaría de Salud Pública, dirigida en ese momento por el actual diputado nacionalista, Arturo Bendaña Pinel, compró mediante licitación 032-2011-SS medicinas antirretrovirales por 46 millones 66 mil 225 lempiras con veinte centavos, de las cuales entre febrero y marzo de 2014 se vencieron varios lotes valorados en 21millones 594 mil 49 lempiras con 20 centavos. Es decir, el 47 por ciento de la compra total.
El 12 de mayo de 2014, dos meses después de haberse vencido las medicinas, la Unidad de Logística, Medicinas, Insumos, Equipamiento e Infraestructura, requirió a DROMEINTER para que en 30 días calendario procediera a reponer los antirretrovirales, el plazo venció el 12 de junio de 2014, pero después de un año, la decidía gubernamental impide conocer a los verdaderos responsables de esta millonaria pérdida.
Con esta actitud asumida por la Secretaria de Salud una vez más las autoridades estarían perjudicando a la población que requiere de los medicamentos. ¿A quién tratan de favorecer? Juzgue usted.
La posición adoptada en la Secretaría de Salud, por un lado favorece a la droguería que vendió el producto porque al no resolverse su reclamo administrativo tampoco estaría obligada a reponer las medicinas vencidas. Sin embargo, también favorece a los funcionarios que a sabiendas de que había en existencia compraron, aceptaron donaciones y manejaron mal el inventario de este medicamento.
Los ejecutivos de la droguería han manifestado que se trata de una situación atípica y en tal sentido, decidieron que su apoderado legal, Cristian Gerardo Medina Sevilla, presentara ante la Secretaría General de la Secretaría de Salud un reclamo administrativo pidiendo dejar sin valor el oficio UL-158-2014 , a través del cual la Secretaría de Salud solicita reponer los antirretrovirales vencidos.
Duerme el sueño de los justos
El documento ha pasado de mano en mano en las distintas dependencias de esa Secretaría de Estado y a un año de su presentación sigue sin resolverse por falta de voluntad de las autoridades. Revistazo conoció que hace varios meses el expediente fue llevado a la gerencia administrativa con propósitos de recoger la opinión financiera de su titular, pero el documento sigue allí, tal como llegó.
“Dice la licenciada que no puede hablar de ese caso porque no lo ha estudiado”, dijo a Revistazo, la directora del departamento de comunicaciones, Nancy Padilla, cuando este medio digital le solicitó una entrevista con la Gerente Administrativa, Karla Alfaro, para hablar sobre el tema.
“Y el problema es que nosotros no podemos hacer nada mientras la gerencia administrativa no se pronuncie”, dijo un procurador legal, de la Secretaría General, consultado sobre la situación por este medio digital.
El 2 de julio de 2014, mediante oficio 671-2014 -SG-SS, la entonces Secretaria General, Cristina Díaz Tabora, envió al director de la Unidad de Logística de Medicamentos, Insumos y Equipamiento, José María Deras, el expediente No 349-2014-SS contentivo del reclamo administrativo de DROMEINTER. En su carta, Díaz le solicita a Deras pronunciarse si es verdad que las autoridades compraron antirretrovirales a sabiendas de que habían en el Almacén Central.
El expediente se demoró dos meses en llegar de la Secretaría General a la Unidad de Logística de Medicamentos, pero de manera responsable esta dependencia cumplió en tiempo y forma con el requerimiento que le hicieron. La unidad logística recibió el documento el 5 de septiembre y lo devolvió debidamente cumplimentado tres días después, el 8 de ese mismo mes. Ver expediente
Lo anterior demuestra que el atraso para resolver el reclamo que hace DROMEINTER ha ocurrido en las dependencias a nivel central de esa Secretaría de Estado.
¿Por qué es atípico?
Dromeinter reclama que la cantidad de medicamento vencido está por encima de los parámetros razonables porque en uno de los productos se venció el 64% del total de la compra, mientras que de los otros dos el 29% por ciento.
En marzo de 2012 DROMEINTER le vendió a la Secretaría de Salud 349,800 capsulas de EFAVIRENZ de 200 mg a un costo total de 1 millón 119 mil 360 lempiras. Cada pastilla a razón de 3.20 lempiras. adjudicación otorgar a DROMEINTER (ver pagina 17)
Además suministró 6,775,660 tabletas de ZIDOVUDINA 300 mg + LAMIVUDINA 150 mg a razón de 3.30 lempiras cada una por un monto de 22 millones 359 mil 678 lempiras y 2,910,720 pastillas de LOPINAVIR 200 mg + RITONAVIR 50 mg, por 22 millones 587 mil 187 lempiras con 20 centavo. Cada pastilla tiene un costo de 7.76 lempiras.
Las medicinas fueron entregadas con una vida útil de 19, 20 y 21 meses , pero en promedio, el 47% de ellas se venció, sin que hasta hoy la Secretaría de Salud haya demostrado que tuvo razones para dejarlas vencer.
De las 349,800 EFAVIRENZ de 200 mg que se habían comprado, 224,190 (64%) con valor de 717, 408 lempiras se vencieron en febrero de 2014.
De 1 millón 960 mil 620 tabletas de ZIDOVUDINA 300 mg + LAMIVUDINA 150 mg valoradas en 6 millones 470 mil 046 lempiras y 1, 856,520 pastillas de LOPINAVIR 200mg + RITONAVIR 50mg con valor de 14 millones 406 mil 595 lempiras con 20 centavos.
Tal como ha quedado demostrado a las autoridades de la Secretaría de Salud poco o nada les interesa recuperar esa millonaria pérdida que afecta la salud de miles de hondureños que requieren de esos productos para seguir viviendo. Veintiún millones y medio de lempiras mal invertidos representan un quebranto a la economía nacional y un atentado contra la vida de los pacientes.
El asistente de la Unidad de Logística, José Mario Matute, ha manifestado que para evitar que sigan ocurriendo situaciones como las registradas en el manejo de los antirretrovirales, los empleados del almacén central realizan en la actualidad revisiones periódicas de fechas de vencimientos, que son registradas por los regentes al momento que ingresa el producto. Asegura que de esa manera le dan prioridad de entrega a la medicina más próxima a vencerse.