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écnicos del Ministerio Publico comenzaron a verificar la información extraída de los teléfonos de los sospechosos en el juicio por asesinato en Berta Cáceres. Dos de los teléfonos estaban encriptados y los técnicos no pudieron recuperar ninguna información que se había borrado del teléfono.

Uno de estos teléfonos parece pertenecer a Daniel Atala. A la solicitud de los fiscales, el técnico presentó dos mensajes. En un mensaje de 2013, Atala habla con odio a su esposa sobre Aureliano (presumiblemente el líder de COPINH, Aureliano Molina) y sus planes de salir del país; Atala se lamenta de que no podrá enfrentarse a Aureliano si se iba. En otro mensaje de 2013, Douglas Bustillo solicita dinero de Atala para pagarle a un informante.

Los abogados defensores de Sergio Rodríguez se opusieron a la presentación de la información dado el acuerdo que se realizó para presentar únicamente mensajes de conversaciones grupales entre los empleados de DESA. El tribunal permitió la presentación de la información dado que los mensajes se incluyeron en el informe del técnico sobre la extracción de información del teléfono. Además, el acuerdo se refiere a la presentación del análisis de los mensajes, que será realizado por otro técnico más adelante en la prueba.

Un analista financiero declaró que, a principios de 2016, Bustillo compró un automóvil por L. 165,000 lempiras (aproximadamente $ 6,800) que no correspondía con sus ingresos en 2015 ni a principios de 2016. Sergio Rodríguez realizó una compra similar de vehículo en 2016 que no se pudo justificar con su ingreso.

El informe financiero también reveló que Sergio recibió salarios de tres compañías de 2013 a 2016, PEMSA, ConCASA y DESA, junto con los ingresos de un contrato con el Banco Mundial. PEMSA, DESA y ConCASA compartieron un espacio de oficina, representación legal y conexiones con David Castillo.