Honduras bajó dos puntos en el Índice de Percepción de la Corrupción 2020 (IPC), de Transparencia Internacional, esta es su calificación más baja cayendo en el ranking de países del puesto 146 al 157 de 180 que son evaluados.
El índice califica a Honduras con 24 puntos, dos menos que los 26 que tuvo en 2019 y, según el índice, es el cuarto país más corrupto de América, solo por detrás de Nicaragua (159), Haití (170) y Venezuela (176).
El problema de la corrupción y la impunidad en Honduras es profundo y multicausal y le acompañan altos niveles de pobreza e inequidad entre la población. Con la llegada del Covid-19 y el paso de dos huracanes categoría cuatro empeoraron la situación de vida de millones de hondureños.
SALIDA DE LA MACCIH PERPETUA LA IMPUNIDAD
En enero del año pasado el Gobierno decidió no renovar el convenio que dio vida a la Misión de Apoyo Contra La Corrupción y la Impunidad (MACCIH), ente que en sus cuatro años de existencia presentó más de una docena de casos de alto impacto por corrupción de funcionarios del Estado.
Con su salida, las acusaciones que presentó el Ministerio Público (MP) se fueron revirtiendo y casi todos los acusados, algunos de alto perfil como los diputados del Caso Pandora, han sido sobreseídos dejando claro su inocencia, a pesar de millones de lempiras en desfalco.
Según un sondeo de opinión realizado en 2019 por el Centro de Estudios para la Democracia (Cespad), un 86% de la población aprueba la gestión de la misión, por lo que la decisión de su no renovación le valió fuertes críticas nacionales e internacionales al Gobierno.
Emergencia de Covid, oportunidad de oro para desfalcar al Estado
Ante la inminente llegada del Covid-19 Honduras declaró estado de emergencia de forma temprana desde mediados de febrero y en marzo se cerraron escuelas, transporte público y negocios no esenciales. A pesar de esto el gobierno no se coordinó con los funcionarios de salud ni creó un plan integral para la pandemia.
Se permitieron compras directas de emergencia y con esta llegó la corrupción en distintas instituciones, solo son algunos de los casos el desperdició de dinero comprando ventiladores mecánicos que no funcionan para atender Covid, 250,000 pruebas PCR que nunca se pudieron utilizar porque se dañaron mientras se transportaban. Se pagaron 48 millones de dólares por adelantado, sin contratos ni garantías, para la compra de siete hospitales móviles que debían funcionar en mayo y hasta la fecha solo uno funciona.
El Ministerio Público informó que tiene casi 20 líneas de investigación por corrupción en compras de emergencia, pero hasta la fecha solo ha presentado dos requerimientos fiscales por delitos de bagatela.
Según datos del Gobierno hasta la fecha se han usado más de seis mil millones de Lempiras para enfrentar la pandemia, pero una de las constantes ha sido la queja de los médicos por la falta de insumos y medicamentos, lo que llevó a la ciudadanía a viralizar en redes sociales y movilizaciones la frase “¿Dónde está el dinero?”
Eta e Iota millones de afectados y miles de damnificados
En un hecho histórico, dos huracanes categoría cuatro azotaron con dos semanas de diferencia entre sí en noviembre de 2020 al país, dejaron un impacto devastador que habría afectado a unos cuatro millones de hondureños, dejando al menos 94 muertos y más de cien mil personas damnificadas.
Las autoridades se comprometieron a realizar la limpieza de las zonas inundadas, construir casas para los damnificados y entregarles bonos, pero hasta la fecha son muchos los lugares donde no ha llegado la ayuda.
Esta falta de capacidad para atender las emergencias ha sido un detonante en la migración, a mediados de enero unos nueve mil hondureños salieron rumbo a los Estados Unidos huyendo de la pobreza y la violencia en una nueva caravana, la primera de 2020.
El IPC en Centroamérica
En la región los resultados son variados, Honduras se mantiene como el segundo país más corrupto de Centroamérica solo detrás de Nicaragua que estaba en el puesto 161 con 22 puntos y bajó al 159 con los mismos 22 puntos.
Mientras que Guatemala estaba en la posición 146 con 26 puntos y al perder un punto cae a la posición 149 con 25 puntos.
En contraste El Salvador mejoró su posición, ya que estaba en el lugar 113 con 34 puntos y ahora está en la posición 104 con 36 puntos, una mejora considerable comparado con los demás países del denominado triángulo norte.
Finalmente, Costa Rica, el país mejor posicionado, estaba en el puesto 44 con 56 puntos y en 2020 mejora dos lugares y queda en el puesto 42 con 57 puntos.
Compras Covid no fueron transparentes en Centroamérica
En el Informe “Compras de emergencia Covid-19 en El Salvador, Honduras y Guatemala”, los capítulos de Transparencia Internacional de estos tres países revelaron que hubo falta de transparencia y rendición de cuentas en el uso de fondos para la emergencia.
El análisis determinó que en los tres países se usaron 9,603 millones de dólares para compras, financiados principalmente por préstamos internacionales, sin condiciones de transparencia o rendición de cuentas ante organismos multilaterales.
El estudio concluye que ha existido falta de compromiso con la transparencia y la rendición de cuentas, para el caso, Honduras fue el país que más información de compras subió en portales, pero es en el que hubo más escándalos por corrupción. El Salvador es el país que menos información entregó, blindando información del público como montos y proveedores para que no puedan ser revisados en plazos desde cinco hasta los 10 años.
Puede descargar el Índice de Percepción de la Corrupción aquí