Un millón de lempiras, unos 53 mil dólares, en concepto de subsidios que, desde el Congreso Nacional, se habrían erogado para mejorar una de las calles de la Colonia Villa Florencia, Departamento de Cortés, es la semilla de la discordia. El patronato de la localidad dice que no se ha invertido nada en su comunidad, mientras que la municipalidad argumenta lo contrario.
Gustavo Velásquez, tesorero del patronato de la Colonia Villa Florencia en San Pedro Sula, se para frente a su casa; observa como la lluvia llena los huecos de las calles de su comunidad y que la Municipalidad de San Pedro Sula ha ignorado por años.Para pavimentar las calles de Villa Florencia, Velásquez dice que requieren de mucha ayuda monetaria; la comunidad literalmente ha “tragado” polvo durante unos 20 años y por ello necesitan apoyo.
Congreso eroga fondos para pavimentación de calles
Buscando corroborar, con la poca documentación que existe en Honduras, sobre el manejo de los fondos que se emiten desde el Congreso Nacional, por concepto de subsidios, Revistazo.com se desplazó hasta Villa Florencia, San Pedro Sula, Cortés.
Guiados por los datos que contiene el informe que la Fundación Democracia sin Fronteras –FDsF- presentó a la ciudadanía hondureña en el año 2008, visitamos la comunidad, misma que aparece como beneficiaria del fondo departamental de Cortés, un millón de lempiras, unos 52 mil 555 dólares, destinados para la pavimentación de las calles.
Bajo el decreto número 80-2006, la FDsF consigna la entrega de dos cheques para la pavimentación de calles, en la citada colonia. Uno se emitió a la municipalidad de San Pedro Sula, por un valor de 500 mil lempiras. El otro, por igual monto, no dice hacia quien va dirigido; solo establece que es para pavimentación de calles.
“El subsidio del que me están hablando!, del medio millón de lempiras no hemos agarrado ni un solo lempira; o sea que ni nos interesa darnos cuenta, ¿ya para qué?”, exclamó con tono de resignación, al ser consultado al respecto, el tesorero del patronato, pues ya transcurren más de tres años desde que el Congreso emitió el cheque.
Aunque el patronato de la localidad no desconoce la existencia de la erogación de ese dinero, Velásquez, quien lleva más que 20 años en la colonia y cuatro integrando los Patronatos de su localidad, dice que han estado tratando de seguir el “destino” de esa ayuda durante más de dos años.
Velásquez afirmó a este medio que ellos conocieron del dinero emitido a su favor, por gestiones e información brindada por la diputada suplente, por el partido liberal, Esna Zoraida Mejía Murguía, quien además les habría aseverado que el dinero no estaba en sus manos y sí en las de la Municipalidad de San Pedro Sula.
Cabe aclarar que sólo hace mención de un cheque por 500 mil lempiras emitido a favor de su comunidad, sin embargo hay registro de dos cheques, por el mismo monto y para la misma obra.
Municipalidad dice que sí invirtió dinero…patronato insiste en que no han hecho nada
Revistazo.com buscó la versión de la Municipalidad de San Pedro Sula. Según Enrique Saa, ingeniero de esa corporación, el proyecto de pavimentación de las calles de la colonia Villa Florencia comenzó en el 2006, año en el que el Congreso Nacional emitió los fondos para la pavimentación de calles.
Saa dijo a este medio que contaban con un presupuesto de 900 mil lempiras para la pavimentación de calles en esa colonia, pero que debido a problemas financieros, no había podido culminar la obra.Sin embargo, el ingeniero no supo explicar si esa cantidad era parte del millón de lempiras que emitió el Congreso Nacional en el 2006 o de otro fondo.
En contraposición con el argumento de Saa, el tesorero del patronato de Villa Florencia insiste en afirmar que en 20 años, jamás se ha trabajado en la pavimentación de calles. «Desde que se hizo esta colonia no se ha vuelto a poner ni un pedacito de pavimento, ni de asfalto ni de pavimento,” aseveró el entrevistado.
Revistazo.com constató en la visita realizada que la única pavimentación que existe sobre las calles de Villa Florencia, es la que las autoridades aseveraron se colocó hace muchos años atrás, cuando fue inaugurada.
Sin Rendición de cuentas, manejo de los subsidios del Congreso Nacional
La falta de transparencia en la emisión de los fondos, pero sobre todo en la entrega, ejecución y rendición de cuentas de ese dinero es y seguirá siendo el problema mayor en el Congreso Nacional.
En la entrega de ayudas o en la construcción de obras no participa ningún ente fiscalizador, tampoco las y los diputados hacen entrega de informes o documento que respalden el adecuado uso del dinero entregado e invertido en la obra destinada.
Según Julio Hernández, ingeniero para proyectos de campo en Choloma, Cortés, ningún diputado ha pedido un informe acerca de cómo se gastaron los fondos de los subsidios; tampoco hay que entregar un informe de gastos a la municipalidad.
Incluso, Hernández dice que la Municipalidad no cuenta con un departamento de auditoria o contabilidad. La situación se torna preocupante considerando que el dinero que emite para las obras, es del dinero proveniente de los impuestos pagados por las y los hondureños.
Un proceso sin supervisión
En el proceso puede prevalecer la sombra de la corrupción. Desde el momento en que se entrega el cheque al patronato, organización o entidad cualesquiera a nombre de quien vaya destinado, el o la diputada perfectamente puede pedir como favor, una parte de ese dinero ya sea para uso personal o financiar su campaña política de reelección.
El patronato, la misma municipalidad o ente ejecutor, puede también, retener lo que quiera de ese dinero e invertir en la obra lo que desee. Con la cultura de la no rendición de cuentas e informes y de no exigencia de los mismos, por parte de la sociedad, nada resulta utópico.
La abogada Marta Sabillón, miembro de la FDsF y partícipe en la recolección y realización del informe en el cual, Revistazo.com sustenta este trabajo periodístico, dice que mientras no haya transparencia puede haber corrupción.
“Cuando hay una falta de controles, cuando el manejo de fondos se hace en una manera tan abierta, tan discrecional y donde intervienen tantos actores y al final no hay uno que asuma la responsabilidad, en cuanto a la rendición de cuentas o reportes de cómo se invirtieron esos fondos, podría darse esa posibilidad,” dice Sabillón.
Lo anterior sólo refleja que aparte de no contarse con la fiscalización adecuada del manejo de los fondos que emanan desde Congreso Nacional, por concepto de subsidios, tampoco se cuenta con estudios socioeconómicos que establezcan las prioridades en materia de desarrollo, dentro de las comunidades a las que se destina la ayuda.