La Alianza por la Paz y la Justicia, APJ, solicitó al ministro de Seguridad, Pompeyo Bonilla, que acelere el proceso de depurar la policía ante la abundancia de denuncias en contra de muchos de los miembros esa institución.
En septiembre, la Alianza instó a Bonilla a pronunciarse con respecto al tipo de denuncias recibidas en los últimos meses en torno a la policía y sobre las acciones concretas que ha emprendido el gobierno para investigar las denuncias.
Por esa razón, la Alianza se reunió con el ministro de Seguridad y el director nacional de la policía, Juan Carlos Bonilla, a fin de conocer los avances obtenido en hacer más efectiva la labor de protección a la ciudadanía.
La APJ ha detectado cierta descoordinación y falta de voluntad política para sancionar a los policías corruptos y también a los que no han superado las pruebas físicas y de confiabilidad.
La Dirección de Investigación y Evaluación de la Carrera Policial (DIECP) practica las pruebas a los agentes y remite los resultados al Ministerio Público y la Secretaría de Seguridad, donde hay falta de coordinación y de voluntad política para sancionar a los que no han aprobado las mismas.
La APJ dijo en un comunicado el 9 de noviembre que tiene conocimiento que la DIECP ha notificado oportunamente a altos funcionarios policiales en cuanto al proceder de sus miembros, especialmente a antiguas estructuras, pero ellos desacataron la convocatoria de la Dirección de Investigación sobre las faltas graves.
La APJ, ente auditor de la sociedad civil, también conoció que al constituirse la DIECP se encontraron más de 3.000 expedientes y muy pocos de ellos fueron concluidos en la fiscalía, evidenciándose así una falta de rigurosidad especial e interés en los casos por parte de las instituciones involucradas en el proceso.