Las dificultades del proceso de notificación y las impugnaciones presentadas por los maestros que recibieron avisos de reparo por haber cobrado pagos irregulares, provocan dificultades en la recuperación de los 900 millones de lempiras que la Secretaría de Educación canceló a los docentes por beneficios colaterales sin el respaldo correspondiente.
De 1,485 notificaciones que realizó el Tribunal Superior de Cuentas (TSC), 900 fueron impugnadas por los docentes. Por esa razón de los 900 millones de lempiras que la Secretaría de Educación canceló irregularmente por pagos de colaterales, el Estado únicamente ha podido recuperar 350 mil lempiras.
La demora para recuperar los recursos públicos es responsabilidad el mismo TSC, que a pesar de haber recibido fondos del exterior para la realización de la auditoria, no socializó el informe. La investigación fue revelada por el movimiento Transformemos Honduras en mayo de 2010 y hasta en ese momento, las autoridades comenzaron a realizar las notificaciones de los reparos.
A la falta de socialización del informe por parte del TSC, también se aúna la desidia de sus autoridades para llevar a cabo la notificación de los reparos por pagos indebidos. De acuerdo a la secretaria general, Alba Rivera, el aviso a los maestros con salarios irregulares se paralizó por las dificultades que presenta el proceso y por la carencia de presupuesto, argumentos que no presentan sustento válido.
Ante esa situación el TSC evidencia un fracaso en la recuperación del dinero pagado a los maestros que no llenaban los requisitos para gozar de los beneficios colaterales. De los 10 mil 500 profesores reparados de acuerdo a la auditoria, sólo 30 acordaron rembolsar los fondos que la Secretaria de Educación les entregó indebidamente.
Vea informe de auditoría – Descargar informe de investigación
