El cardenal argentino Jorge Mario Bergoglio es el papa número 266 de la historia. Es pontífice con el nombre de Francisco I.
Es el primer papa de la Compañía de Jesús y también el primer latinoamericano en alcanzar la Silla de Pedro.
Bergoglio salió el 13 de marzo al balcón de la Plaza de San Pedro vestido todo de blanco y con una sencilla cruz que le colgaba, tras ser escogido por sus colegas.
El arzobispo de Buenos Aires, de 76 años, se convirtió en el primer jesuita de la historia en ocupar el puesto.
El nombre que eligió, Francisco I, es en homenaje a Francisco de Asís.
Bergoglio fue ungido como cardenal por Juan Pablo II en el consistorio del 21 de febrero de 2001, con el título de San Roberto Belarmino, al igual que el cardenal hondureño Oscar Andrés Rodríguez.
Nacido en Buenos Aires con raíces italianas, Bergoglio estudió y se graduó de ingeniero químico, pero después eligió el sacerdocio y entró en el seminario de Villa Devoto. El 11 de marzo de 1958 se unió al noviciado de los jesuitas y posteriormente estudió humanidades en Chile.
En 1963 regresó a Buenos Aires y obtuvo una licenciatura en filosofía en el máximo colegio de San José, en San Miguel.
Entre 1964 y 1965 fue profesor de literatura y psicología en el Colegio de la Inmaculada Concepción de Santa Fe, y en 1966 en el colegio del Salvador de Buenos Aires.
De 1967 a 1970 estudió en la Facultad de Teología del colegio San José, donde se graduó. Y en 1969 fue ordenado sacerdote.
También ha sido maestro de novicios en Villa Barilari, de San Miguel (1972-1973), profesor de la Facultad de Teología y Consultor de la Provincia y rector del Colegio Arriba.
En la década de los 80 viajó a Alemania para completar su tesis doctoral y posteriormente se trasladó a la iglesia de la Compañía de Jesús de la ciudad de Córdoba como director espiritual y confesor.
El 20 de mayo de 1992, Juan Pablo II lo nombró obispo titular de Auca y auxiliar de Buenos Aires. El 27 de junio de ess año recibió de la Catedral de Buenos Aires la ordenación episcopal de parte del cardenal Antonio Quarracino, el Nuncio Apostólico Monseñor Ubaldo Calabresi y el obispo de Mercedes-Luján, monseñor Emilio Ogñénovich.
El 3 de junio de 1997 fue nombrado arzobispo coadjutor de Buenos Aires y, a la muerte del cardenal Quarracino, el 28 de febrero de 1998, fue nombrado arzobispo de Buenos Aires. De noviembre de 2005 a noviembre de 2011 fue presidente de la Conferencia Episcopal argentina.
Es miembro de las congregaciones para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos para el Clero de los institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, y del Pontificio Consejo para la Familia de la Comisión para América Latina.
También es autor de los libros «Meditaciones para religiosos», de 1982; «Reflexiones sobre la vida apostólica», de 1986, y «Reflexiones de esperanza», de 1992, según dijo el Vaticano.