Favoritismo, sobrevaloraciones y otras violaciones a la Ley de Contratación del Estado plagaron el contrato que por 118.9 millones de dólares (unos 2,789 millones de lempiras) el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) firmó con la empresa Distribuidora Metropolitana S.A. (Dimesa).

De acuerdo a la Unidad de Apoyo Fiscal (UNAF), este acuerdo tenía una sobrevaloración de 54.8 millones dólares (1,286 millones de lempiras).

El contrato era para la adquisición, reparación y mantenimiento de equipos médicos, como ser camillas, máquinas de respiración, sistemas de imágenes, de anatomía patológica, para atenciones pediátricas y otros suministros para laboratorios y farmacias, entre otros y se firmó el 9 de mayo de 2011 por 95,244, 066.00 dólares (2,236 millones de dólares) para ejecutarse en 84 meses (o sea, 7 años).

El entonces director del IHSS, Mario Zelaya, suscribió el acuerdo en representación del IHSS y Juan Alberto Madrid Casaca por parte de Dimesa.

Posteriormente, el 10 de julio de 2012, se le hizo un adendum al contrato por 23.6 millones que serían destinados para complementar la adquisición del equipo biomédico que no fue incorporado en el convenio original.

De acuerdo con el Primer Informe de la Comisión Interventora del IHSS, presentado en febrero de 2014, “el contrato nunca debió de celebrarse bajo las condiciones en que se suscribió debido a que no se tuvo a la vista ningún documento de respaldo sobre la necesidad del equipo solicitado por las diferentes unidades del Instituto”.

Y se acota en este documento que el IHSS no contaba con la disponibilidad presupuestaria para honrarlo y, además, según “auditorías realizadas por expertos en equipo biomédico nos indican que hay una sobrevaloración en el costo del contrato” de unos 62.9 millones de dólares (unos 1,476 millones de lempiras); es decir unos ocho millones de dólares (187.6 millones de lempiras) más de lo que calculó como sobreprecio el Ministerio Público.

Por ejemplo, una camilla eléctrica que en el mercado se cotizaba 5,000 dólares (117,300 lempiras), pero Dimesa la vendió al IHSS por 54,000 dólares (1,266,840 lempiras), según el informe de la interventora.

Equipos sobrevalorados, según la Comisión Interventora

Productos adquiridos	Precio pagado por el Seguro Social	Precio de mercado	Diferencia ( Valor de sobreprecio)
Imágenes (Habilitación y mantenimiento)	$5,915,848.76	$5,915,848.76	$9,9437, 167.43
Imágenes (Suministros y mantenimiento)	$30,963,196.10	$20, 285,050.16	$10,678,145.94
Equipo de pediatría (Habilitación y mantenimiento)	$4,099,823.18	$932,392.02	$3,167,431.16
Equipo de pediatría (Habilitación y mantenimiento)	$8,321,484.48	$2,836,952.63	$5,484,531.85
Equipo de ortopedia y neurocirugía (Habilitación y mantenimiento)	$1,107,887.88	$469,757.53	$638,130.35
Equipo de ortopedia y neurocirugía (Habilitación y mantenimiento)	$32,297,942.37	$14,865,445.57	$17,432,496.80
Equipo de anatomía patológica (Habilitación y mantenimiento)	$400,000.00	$192,000.00	$208,000.00
Equipo de anatomía patológica (Habilitación y mantenimiento)	$1,800,780.75	$803,084.21	$997,696.64
Equipo de laboratorio clínico y farmacia ( suministro y mantenimiento)	$896,035.59	$258,521.78	$637,513.81
Adendum al contrato	$23,668,761.80	$9,416,966.67	$14,251, 795.13
Totales	$118,908,928.34	$55,976,016.24	$62,932,909.10

Fuente: Primer Informe de la Comision Interventora del IHSS

Las autoridades del IHSS durante la administración de Mario Zelaya permitieron que Dimesa hiciera entregas retrasadas de los productos y cambios de equipos que tenían que suministrar porque se suponía que eran de mejor calidad, pero ninguna autoridad supervisó ese procedimiento.

Ante estas anomalías, la UNAF interpuso un requerimiento fiscal por fraude contra Schucry Kafie Larach, el mayor accionista de Dimesa y los otros socios: Lisandro René Ponce, René Israel Medina, Donaldo Reinyeri Velásquez y Hugo Alberto Mejía.

El empresario Schucry Kafie, accionista de Dimesa, enfrenta cargos por fraude por la supuesta venta sobrevalorada de equipo al IHSS (Crédito : www.schucrykafie.com)

Por abuso de autoridad se procedió contra el exdirector Mario Zelaya, el jefe de Administración del IHSS, José Bertetty y Edgardo Quiroz Moreno, quien laboraba en la unidad de Biomédica de la institución.

Todos los imputados tiene auto de formal procesamiento, pero solo Zelaya y Bertetty están con prisión preventiva.

Ejecutivos de Dimesa crearon una página en Internet para negar los señalamientos que les formuló la Comisión Interventora.

Sin embargo, terminaron renegociando el contrato en términos mucho más favorables al IHSS, que al final estará pagando solo la mitad de lo originalmente pactado con Dimesa. Después de que saliera a la luz pública el descalabro en el IHSS, la Comisión Interventora, nombrada para resolver el desastre, modificó el contrato con Dimesa y con ello pagó $60,187,015.31 (1,412 millones de lempiras), por lo que la entidad dejó de pagar 58,590,060.68 dólares, es decir uno 1,300 millones de lempiras)

A la empresa Dimesa se le renegocio el contrato, por lo que no se le pagaron 58 millones de dólares (unos 1,286 millones de lempiras). (Crédito: Diario El Heraldo)

Gerente de DIMESA: “Brindamos un excelente servicio al IHSS”

Por su parte, el gerente de Proyectos de Dimesa, Mauricio Bueso, dijo a Revistazo que el contrato administrativo-mercantil entre Dimesa y el IHSS nació a raíz de una licitación pública internacional y su adjudicación fue correcta, ya que fue revisado y aprobado por todas las instancias legales y gubernamentales pertinentes.

“Durante la duración del contrato Dimesa brindó un excelente servicio y cumplió entregando todos los equipos, dejándolos en óptimas condiciones para la disposición de todos los derechohabientes del IHSS”, acotó Bueso.

“Dimesa niega sobrevaloración alguna ya que el contrato administrativo-mercantil con el IHSS iba más allá de ser un simple contrato de compra venta ya que incluía—además de otros aspectos—el suministro y mantenimiento de 558 equipos biomédicos totalmente nuevos, la reparación y mantenimiento de 350 equipos existentes”, entre otros, mencionó Bueso.

Otros componentes del contrato contemplaban el suministro de partes, repuestos y accesorios de manera ilimitada, la capacitación de operarios y el envío de derechohabientes a hospitales y clínicas privadas sin costo alguno para el IHSS, explicó el ejecutivo de Dimesa.

“Dimesa reitera que en ningún momento existió algún tipo de perjuicio ni mucho menos daño patrimonial al IHSS. Se cumplió a cabalidad con el contrato administrativo mercantil y solamente se recibió el pagó del 50% del valor total del contrato, el cual fue cancelado por la Junta Interventora del IHSS aduciendo motivos de fuerza mayor y no por una supuesta sobrevaloración”, insistió Bueso.

La Comisión Interventora del IHSS, de acuerdo a informes de expertos, determinó que los equipos médicos adquiridos de Dimesa estaban sobrevalorados.

Para finalizar, Bueso explicó que el contrato contenía una cláusula que establecía que en caso de conflicto o incumplimiento de alguna de las partes se resolvería vía arbitraje ante el Centro de Conciliación y Arbitraje de la CCIT y no en lo penal, como ocurrió.

El contrato con Dimesa fue cancelado cuando todavía faltaban por pagarle unos 58 millones de dólares (unos 1,286 millones de lempiras).